martes, 31 de enero de 2012

odio

Abrí la puerta con el pulgar
me siento tan desnudo
entro, me acomodo
me voy de aquí como un número
números. números.
un horario de entrada. un horario de tren
un numero de documento, un numero de legajo
una contraseña, un código de tarjeta
un numero de una cuenta bancaria
ahora soy un pequeño código de barras

a mi la capital me erosiona la piel
cada segundo acá es la luna
y yo soy el mar
somos un mar de preocupaciones y trenes perdidos
somos un mar de ceños fruncidos descafeinados
pero siempre con edulcorante

Ya no quedan bolsas de residuo en los tachos
miralo nomás, gran hombre porteño
el y la máquina de cafe, son uno
Mi silla es una reposera
sr traumatólogo
mi silla es una reposera
horacio
 cómo no querés que me quede dormido?

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